Matías Rodríguez Barajas 1903 - 1941 Editar

Matías Rodríguez Baraja, “O Baraja” 

Matías Rodríguez Baraja nació el 24 de febrero de 1903 en Castronuño (Valladolid). Eran sus padres Dionisio Rodríguez Chillón, de profesión labrador, e Isabel Baraja Corzo. Quedó huérfano de padre antes de cumplir los ocho años. Isabel, su madre, que aún no había cumplido los treinta, decidió emigrar a México con María Consuelo, la hija pequeña, dejando a Matías al cuidado de sus abuelos. En 1922 Matías tomó la decisión de abandonar su pueblo en busca de una vida mejor en tierras gallegas. Con 19 años se establece en la ciudad de A Coruña (Galicia), donde aprende el oficio de tipógrafo y se inicia en el sindicalismo anarquista. Más adelante se casaría con Mercedes Franqueira Costa, y habitaba una vivienda sita en la calle de la Torre núm. 103. En 1933 nace su único hijo: Mario. Matías trabajaba como tipógrafo y en 1932 tiene una gran actividad sindical. Conocido como O Baraja, en el mes de mayo de ese año organizó una reunión de la Asociación Tipográfica de A Coruña para movilizar a los parados del ramo y en agosto representó al Sindicato de Teléfonos coruñés en el Pleno Regional de la C.N.T. en Ferrol. Firmó la ponencia al punto 6º del orden del día del Pleno: “Frente al paro forzoso, ¿qué orientación procede a fin de que no falta trabajo y no cunda la miseria en los hogares proletarios?” [1] En diciembre de 1932 publica un artículo en El Luchador titulado “Datos para la historia de un proceso sindical en Galicia": «Falto de facilidad de palabra, para defenderme, caso de ser acusado, quiero que estos trabajos sean mi acusación y mi defensa. Que los camaradas con serenidad y despojados de sectarismos, consulten cada uno su propia conciencia y después… juzguen con conocimiento de causa para no llamarse a engaño.» [2] Según Dionisio Pereira «Matías se distinguió a lo largo de 1932 y 1933 en sus críticas a la línea moderada que siguió al CRG y, en particular, a su secretario José Villaverde. Estas críticas se hicieron explícitas en El Luchador, como las compartió su director Federico Urales.» Fue socio del Centro de Estudios Sociales “Germinal” y en 1933 es socio fundador del Ateneo Libertario “Nueva Era”. Se desconoce la trayectoria de Matías Rodríguez Baraja durante la Guerra de España. No ha sido localizada documentación que acredite su participación en la contienda, pero si la que le sitúa residiendo en la calle Barón de San Luis núm. 10 de Barcelona. Hacia el final de la Guerra de España buscó refugio en Francia. Se desconoce cuándo y en qué condiciones pasó la frontera. Según una declaración de la esposa de Matías, realizada en octubre de 1941, éste «se encontraba trabajando en Barcelona y fue movilizado por los rojos internándose en Francia a la terminación de la Guerra.»[3]

Lo cierto es que Matías no cruzó solo la frontera francesa, ya que está documentado que lo hizo con Mercedes  y el hijo de ambos de 6 años, con los que convivía en Barcelona, y que los tres fueron internados en Le Bacarés, islote A, barraca 5. Al poco tiempo de su llegada a Le Bacarés, y enterado de que México estaba dispuesto a acoger a los republicanos españoles que huyendo del franquismo se habían refugiado en Francia, Matías contactó con Bernardo Reyes, primer secretario de la Legación de los Estados Unidos Mexicanos en París. Le hizo saber de su situación, rogándole informara de la misma a su madre en Tampico. También le pide ayuda para poder llegar a México junto a su mujer y su hijo. Bernardo Reyes cumple con su cometido, y el 5 de abril de 1939 escribe a Isabel Baraja Corzo: «En virtud de haber salido de Cataluña, cuando dicha región fue ocupada por las tropas facciosas, se halla refugiado en el campo de Bacarés acompañado de su esposa y de un hijo de seis años; suplica a usted que, si ello le es posible, le envíe fondos para poder trasladarse a la República Mexicana, en la inteligencia de que debe usted calcular que serán necesarios unos 250 dólares para el viaje de los tres.»[4]

Una semana más tarde Matías dirige un segundo escrito a Bernardo Reyes para agradecerle que éste haya contactado con su madre en México y le notifica que no ha recibido el cuestionario que debe cumplimentar para que su solicitud de inmigración sea atendida.

No sabemos si Matías llegó a recibir el formulario ni los 250 dólares solicitados por las autoridades mexicanas a su madre para el traslado a México, aunque es fácil adivinar que no recibió la ayuda deseada, que se vio obligado a alistarse en una Compañía de Trabajadores Extranjeros y que su esposa e hijo fueron devueltos a España.

Matías fue detenido por el ejército alemán e internado con el número 36826 en el campo de prisioneros de guerra de Trier (Alemania), donde permanece hasta el 22 de enero de 1941, que junto a 774 prisioneros españoles es obligado a subir a un tren con destino a Mauthausen, donde llegó tres días después. Fue registrado con el número de matrícula 3523,[5] de profesión tipógrafo. Dejó como domicilio el de la calle La Torre de A Coruña, y como persona que contacto el nombre de su esposa.

Se desconoce que trabajo fue asignado a Matías en el campo de concentración.

El 17 de febrero de 1941 es transferido al subcampo de Gusen, el subcampo más grande de Mauthausen. Sabemos que fue registrado con otro número de matrícula (10059) y ocupó la barraca número 17.

Pereció diez meses más tarde, el 11 de noviembre de 1941 a las 07:23 horas, de una insuficiencia mitral según consta en los documentos nazis. Cuatro días después sus restos fueron convertidos en humo en cenizas. Tenía 38 años.[6] El 9 de octubre de 1941, apenas un mes antes de su muerte, la Cruz Roja de A Coruña, a petición de Mercedes, su esposa, escribe a la presidencia de la Cruz Roja Alemana en Berlín, solicitando noticias de Matías: «Este paisano se encontraba en Barcelona y fue movilizado por los rojos, internándose en Francia a la terminación de la Guerra Española. Después fue hecho prisionero del ejército alemán y hace tiempo tuvo noticias que se encontraba en un campo de concentración, siendo su última dirección: Gefangennenmer (Prisionero) 36826 - Stalag XII-D. El sujeto que se busca es natural de Castronuño (Valladolid), tiene 38 años y de oficio impresor.»[7]

El 11 de noviembre de 1941, el mismo día de la muerte de Matías, la Cruz Roja en Berlín dirige escrito al campo de Mauthausen preguntando por él.[8] No hubo respuesta. El 8 de enero y el 11 de marzo de 1942, la Cruz Roja alemana insiste ante el comandante de Mauthausen.[9] No hubo respuesta.

La Cruz Roja en A Coruña recibe por fin una carta de la Cruz Roja alemana fechada el 6 de junio de 1942 en la que se indica: «En respuesta a su carta mencionada anteriormente, dirigida a la Cruz Roja Alemana, hacerles saber que el español citado murió en el campo de Mauthausen. La Cruz Roja Alemana le pide amablemente que notifiquen a Mercedes Franquiera el documento adjunto y se lo entreguen.»[10] El documento al que alude el texto es el certificado de defunción expedido por las autoridades de Mauthausen.

El 14 de abril de 2022, el Atuntamiento de Castronuño, su pueblo natal, le rindió un homenaje colocando una stolpersteine para que siempre sea recordado, y editó su historia en la publicación “Matías regresa a casa”.

Los nietos de Matías, declinaron participar.

María Torres Celada

[1] Solidaridad Obrera núm. 87, 3 de septiembre de 1932. Nomes e voces.

[2] El Luchador, Barcelona, núm. 90. 23 de diciembre de 1932, pp.2. Datos facilitados por Eliseo Fernández

[3] ITS Archives, Bad Arolsen. Copy of 1.1.26.3 / 1719276

[4] Archivo Histórico Genaro Estrada. Secretaría de Relaciones Exteriores de México en Repositorio de Memoria Histórica y Cultural de México, Memórica.

[5] Libro Memorial. Españoles deportados a los campos nazis (1940-1945), Benito Bermejo y Sandra Checa. Ministerio de Cultura de España,2006

[6] ITS Archives, Bad Arolsen. Copy of 1.1.26.1 / 1307960 / 1307974/ 1303031/ 1298570/ 1290850/ 1290850  y Copy of 1.1.26.3 / 1719274/ 1719275/

[7] ITS Archives, Bad Arolsen. Copy of 1.1.26.3 / 1719276

[8] ITS Archives, Bad Arolsen. Copy of 1.1.26.3 / 1719277

[9] ITS Archives, Bad Arolsen. Copy of 1.1.26.3 / 1719279

[10] ITS Archives, Bad Arolsen. Copy of 1.1.26.3 / 1719282

Fuente:

https://www.buscameenelciclodelavida.com/2019/10/matias-rodriguez-barajas-un.html

Matías kam am 24. Februar 1903 um 11 Uhr vormittags im Elternhaus an der Calle Real in Castronuño auf die Welt. Seine Eltern waren Dionisio Rodríguez Chillón, jüngster Sohn von José und Isidora, Bauer, und Isabel Baraja Corzo, zweitälteste Tochter von Bartolomé und Leoncia, beide aus Castronuño.

Sein Vater verstarb, bevor er acht Jahre alt wurde. Seine Mutter Isabel wanderte aus und übergab Matías der Obhut seiner Großeltern. Angeblich nahm sie die jüngste Tochter Consuelo mit. Über das Kind sowie die Reise und den Aufenthalt in Mexiko ist nichts nachgewiesen. Dagegen ist Isabel Barajas Ankunft in der nordostmexikanischen Hafenstadt Tampico im Bundesstaat Tamaulipas am 14. Dezember 1911 urkundlich belegt, wo sie als Haushälterin im Hotel Rivera arbeitete.

1922 zog der 19-jährige Matías nach A Coruña um. Dort arbeitete er als Schriftsetzer und heiratete Mercedes Franqueira Costa. Das Ehepaar lebte in der Calle de la Torre, 1933 wurde der Sohn Mario geboren.

Das Schicksal von Matías Rodríguez Barajas während des Spanischen Bürgerkriegs ist zwar unbekannt, doch aus den Dokumenten geht sein Wohnsitz im Carrer Baró de Sant Lluís Nr. 10 in Barcelona hervor. Laut Aussage seiner Ehefrau im Oktober 1941 „arbeitete er in Barcelona und wurde von den Roten mobilisiert, und ging nach Kriegsende nach Frankreich“.

Es ist bekannt, dass er von der Gestapo festgenommen und im Stalag XII D auf dem Petrisberg über Trier mit der Gefangenennummer 36826 inhaftiert wurde. Am 22. Jänner 1941 verließ er mit einem Zug mit 775 spanischen Republikanern den Bahnhof Trier Richtung Mauthausen. Drei Tage später kam er im Spanierlager an, wo er als Schriftsetzer mit der Gefangenennummer 3523 eingetragen wurde.

Am 17. Februar 1941 wurde er in den Block 17 des Nebenlagers Gusen (Gefangenennummer 10059) gebracht, wo er laut NS-Urkunden am 11. November 1941 um 7:23 Uhr an Mitralklappeninsuffizienz starb. Vier Tage später wurden seine sterblichen Überreste verbrannt. Er wurde 38 Jahre alt.

Ein Monat vor Matías’ Tod schrieb das Rote Kreuz A Coruña am 9. Oktober 1941 auf Antrag seiner Frau Mercedes den Vorsitz des Deutschen Roten Kreuzes in Berlin um Nachrichten an: „Besagter Landsmann hielt sich in Barcelona auf und wurde von den Roten mobilisiert, und ging nach Kriegsende nach Frankreich. Danach wurde er von der deutschen Wehrmacht gefangen genommen, und vor längerer Zeit wurde bekannt, dass er sich in einem Konzentrationslager aufhielt. Seine letzte Anschrift lautete: Gefangenennummer 36826 – Stalag XII-D. Die gesuchte Person ist aus Castronuño (Valladolid), 38 Jahre alt, von Beruf Schriftsetzer.“

Am 11. November 1941, Matías’ Todestag, schrieb das Rote Kreuz in Berlin das Lager Mauthausen mit einer Anfrage nach ihm an. Es erfolgte keine Antwort. Am 8. Jänner und am 11. März 1942 folgten weitere Anfragen beim Lagerkommandanten von Mauthausen – ebenfalls ergebnislos.

Schließlich erhielt das Rote Kreuz in A Coruña einen Brief vom Deutschen Roten Kreuz, datiert am 6. Juni 1942. Darin hieß es: „In Beantwortung Ihres eingangs erwähnten Briefes an das Deutsche Rote Kreuz wird hiermit bekanntgegeben, dass der besagte Spanier im Lager Mauthausen starb. Das Deutsche Rote Kreuz ersucht Sie freundlichst, das beigefügte Dokument Mercedes Franqueira mitzuteilen und zu überreichen.“ Das im Brief erwähnte Dokument ist der von den Behörden in Mauthausen ausgestellte Totenschein.

Mercedes Franqueira arbeitete als Putzkraft im Banco Hispano Americano in A Coruña. Sie versuchte ein neues Leben anzufangen und bekam eine Tochter aus einer weiteren Beziehung, Mercedes Pedrido Franquiera.

Mario, der Sohn von Matías und Mercedes, wanderte nach Kanada aus. Er heiratete Ángeles, mit der er drei Söhne hatte: Mario, Suso und Agustín. Er verstarb 2008.

María Torres Celada

Quelle:

https://www.buscameenelciclodelavida.com/2019/10/matias-rodriguez-barajas-un.html

Ergänzung Text 2022: Seine Heimatstadt würdigte ihn mit der Platzierung eines Stolpersteins, damit er immer in Erinnerung bleibt, und veröffentlichte seine Geschichte in der Publikation „Matías kehrt nach Hause zurück“.